Gigantes de 3,05

El Gaintxu S.T. comenzó sus entrenamientos allá por los primeros días de septiembre. En aquel entonces el equipo no contaba con ningún lugar de entrenamientos por lo que decidieron alojarse en la legendaria cancha de los suburbios de Urretxu que da nombre al equipo. Durante los meses de septiembre y octubre el equipo ha contado con la benevolencia de los dioses de la climatología, lo que les ha permitido entrenar con cierta asiduidad y en condiciones más o menos aceptables. La llegada del mes de noviembre ha resultado fatídica. Las sesiones de entrenamientos en su mayoría han estado a merced de los elementos. El viento, la lluvia o el frío, han pasado a formar parte de las sesiones, como uno más, como todo aquel que acude a los entrenamientos, aportando lo que buenamente puede…

Desde hace tiempo, como ya comentamos anteriormente, el equipo sigue esperando ser reubicado en algún recinto cerrado de la comarca, las alternativas barajadas han sido varias, pero por diversas razones sigue sin concretarse ninguna de ellas. Uno de los motivos es la falta de canastas. Este problema parecía estar solucionado al saberse que las canastas estaban en camino hacia la comarca del alto urola, pero digo parecía, porque con el paso de las semanas, siguen estando en el camino.

Según ha podido saber esta redacción tras una profunda investigación, “Las gigantes de 3,05m” salieron de una pequeña localidad al este de Rusia cargadas en un espectacular convoy, al llegar a la frontera con Mongolia, diversos problemas con el visado del camionero impedían el paso al trailer. A los tres días el camionero que no lograba solucionar sus problemas, encargó a una familia nómada de Mongolia que transportase a las 2 gigantes hasta la frontera con China. Tras ofrecer una suculenta cantidad de dinero, la carga quedó bien amarrada en el carro propulsado por dos hermosos yaks.
A su llegada a China volvían a ser acomodadas en un lujoso camión de la empresa Golden Will, propiedad a su vez de la empresa Lighthouse Consulting Limited dirigida por Fen Bai Ye, que está interesada en la Real Sociedad S.A.D y que preguntó por la situación del equipo de Gaintxu.
De China a Pakistán, y de aquí a Afganistán donde se dice, puesto que no podemos confirmarlo, que cierto multimillonario saudí escondido en las montañas afganas organizó un espectacular torneo 3 X 3. Próximo destino: Irán.

El viaje por el país persa transcurrió con normalidad hasta llegar a la frontera con Irak en Arvandrud, cerca de Kuwait donde estuvieron a punto de ser intercambiadas por un pozo petrolífero, ya que un jeque local decía que nunca antes había visto unas canastas tan modernas y sofisticadas como aquellas, y que las necesitaba para llevar al Arvandrud B.T. a lo más alto del basket iraní. Pero el camionero, en un acto de profesionalidad, dijo que su deber era llevar su carga hasta territorio Iraquí, y que así lo haría. Esto provocó el enfado del jeque, que desplegó todo su arsenal armamentístico para frenar a aquel diablo sobre ruedas en el que se había convertido el camión. Afortunadamente, no sabemos si debido a la pericia del camionero con el volante o a la suerte que parecen dar estas canastas, llegaron a territorio Iraquí. Por increíble que parezca, el viaje trascurrió sin ningún altercado reseñable, únicamente un pequeño susto ya que el conductor en un rutinario control de alcoholemia apunto estuvo de sobrepasar el límite con una cantidad de 0,79 g/l de alcohol en sangre, cuando la máxima permitida allí es de 0,80 g/l. Una vez más la bendición de las canastas seguía protegiéndolas.
Turquía: Temblor sísmico de 9,7 grados en la escala escala de Richter, pecata minuta, como si nada. Allí estaban las dos gigantes observando el desastre, intactas pero incomunicadas. Un helicóptero las detectó como supervivientes de la tragedia y las trasladó hasta Tbilisi (Ciudad de nacimiento de Georgi Demetradze), capital de Georgia, a orillas del río Kura. Reemprendieron el viaje nuevamente hacia Rusia, esta vez sin ningún problema, ya que al tratarse de victimas de una tragedia, nadie puso ninguna pega. El paso por Ucrania estuvo marcado por las bajas temperaturas y la climatología adversa. Pasada la frontera con Polonia la nieve hacía acto de presencia y nuestras entrañables estructuras de hierro tuvieron que ser transportadas en trineo, al más puro estilo de la pirena, con la inestimable ayuda 36 nobles perros que hacían deslizar la carga. Una vez ya en Alemania no hubo ningún problema, y la fiabilidad germana hizo gala de su fama.

Las últimas noticias que tenemos datan de hace varios días y ubican el paquete en el norte de Francia, bloqueado debido a ciertos desprendimientos de tierra provocados por la lluvias que tienen en alerta al estado galo. Estamos seguros de que una vez más saldrán de esta.

Mientras tanto el Gaintxu S.T. seguirá esperando, y entrenándose a la intemperie, y esta redacción seguirá informando puntualmente de todo cuanto suceda.