Golpe en la mesa del Gaintxu tras la derrota de la semana pasada. Los amarillos se concentraron en el juego y no se dejaron llevar ni por las decisiones arbitrales ni por los roces típicos con el equipo rival. Los jugadores comenzaron unidos como equipo y terminaron de la misma manera: animando a los compañeros en los momentos difíciles, siendo generosos en el juego y, como siempre debería ser, disfrutando del basket. Lo más importante de esta victoria no es el marcador sino la recuperación del espíritu gaintxuarra: txaskis, sudor y hormigón.
Ataque del Tximista Elektrizitatea
La cancha de Domingo Agirre hizo honor al sobrenombre de "la congeladora" con una temperatura casi invernal que recibió ateridos de frío tanto a jugadores como a espectadores. El comienzo del partido hizo subir un poco la temperatura, con canastas del Aluminios que eran rápidamente contestadas por el Tximista. El equipo local (el Gaintxu, no se vayan a confundir) basó su juego en el quinteto inicial, que tras unos minutos pudo asentarse en el partido y dió comienzo a un parcial de 10 - 2. Los diez primeros minutos terminaron con un 18 - 8.
La tónica general del segundo cuarto siguió siendo la misma que en el primero, con un Aluminios Francisco Alberdi que marcaba el ritmo de juego y un Tximista Elektrizitatea que se esforzaba por no quedarse atrás en el marcador. Puede que por el frío o tal vez por los nervios, los locales sufrieron varios minutos de despiste que fueron aprovechados por los legazpiarras para seguir con vida gracias a su acierto desde la línea de tiros libres. Tras veinte minutos de juego el resultado era de 31 - 18.
Sir trata de escaparse de un rival
El tercer cuarto sirvió para confirmar el buen juego del Gaintxu, con un gran defensa que consiguió robar innumerables balones. El tiro no funcionaba bien, pero era compensado con el juego interior. Del equipo rival destacó sobre todo el #14, que vistas las circunstancias decidió liderar a los verdes con tres triples que metieron el miedo en el cuerpo a los locales. Desde ese momento tuvo que ser defendido individualmente para evitar la remontada. El cuarto terminó con 53 - 35.
Los 18 puntos de diferencia fueron una losa para el Tximista, que perdió la concentración en el último cuarto permitiendo al Gaintxu jugar con comodidad. Los visitantes presionaron durante toda la cancha para tratar de robar balones, aunque con poco éxito. Esta vez los tiros libres funcionaron bien en el Aluminios Franncisco Alberdi, que poco a poco se fue distanciando hasta el 80 - 53 final.
La diferencia final no hace justicia al Tximista Elektrizitatea, que durante la actual temporada está sufriendo un bajón de juego impropio de un equipo de su calidad. Tienen jugadores con clase, veteranos para dar carácter al juego y gente joven con ganas de aprender. Si consiguen levantarse seguro que podrán volver a dar alegrías a la afición legazpiarra.
Foto de familia
Como siempre, desde aquí agradecemos a Saray y a Dusko su labor con las estadísticas. También agradecemos a Unai su ayuda en el reportaje fotográfico: la mayoría de las fotos son suyas, se nota que tiene mano con la cámara! Y como no, al resto de tifosi hormigoneros que animaron mientras sufrían el frío de "la congeladora".
Aluminios Francisco Alberdi: 80 (18 + 13 + 22 + 27)
Tximista Elektrizitatea: 53 (8 + 10 + 17 + 18)
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